PROTEGETE EN LAS FIESTAS: REFUERZA TU SISTEMA INMUNE.
Centrados en la época de fiestas, te damos algunos consejos y aspectos a tener en cuenta para mantener un correcto funcionamiento de nuestro sistema inmune.
Es de esperar que viviremos pocas circunstancias en nuestra vida como ésta, en la que el Covid acecha. Todos sabemos de personas que han tenido el virus sin pena ni gloria, y que apenas tuvieron síntomas. Otros en cambio no fueron tan afortunados, por desgracia. El porqué de unos sí y otros no, la ciencia es hoy por hoy incapaz de explicarlo, con la salvedad de las enfermedades crónicas previas que pudieran estos últimos padecer. Pero lo que sí sabe la ciencia es la importancia de tener un sistema inmune fuerte.
Para conseguirlo, destacan entre otras cosas, la importancia de mantener una dieta sana y saludable, practicar deporte (mejor al aire libre), evitar el estrés, descansar y dormir bien. Pero también hay formas de ayudar al cuerpo a estar a punto, aportando vitaminas y minerales que potenciarán el sistema inmunológico.
Vitamina A
Tiene la característica de afectar a partes específicas del sistema inmune. La vitamina A es muy importante para el sistema inmunológico ya que estimula la producción de linfocitos (y su actividad), un tipo de células blancas sanguíneas. Los linfocitos atacan a los agentes invasores y ayudan al cuerpo a producir las proteínas llamadas anticuerpos, que mantendrán a raya infecciones futuras.
Buenas fuentes de vitamina A para tu sistema inmunológico: el brécol, los huevos y la col rizada, o kale.
Vitamina C
La “primera línea de defensa” a la hora de combatir gérmenes e infecciones son los revestimientos de la nariz, el intestino y los pulmones, en los que el colágeno tiene un importante papel. Y la vitamina C es fundamental a la hora de sintetizar el colágeno. Sin ella, el cuerpo no es capaz de elaborarlo y, por tanto, dichos revestimientos necesitan vitamina C para mantenerse en forma.
También ayuda al sistema inmune a reaccionar ante virus e infecciones, incrementando la producción de células blancas, enzimas y anticuerpos. Tiene igualmente efectos antiinflamatorios y antioxidantes, elementos clave para limitar el perjuicio causado por los radicales liberados durante una respuesta inmune.
Buenas fuentes de vitamina C: los cítricos, los kiwis, las frutas del bosque, los pimientos y las espinacas.
Vitamina D
La Vitamina D constituye una de las vitaminas más importantes del sistema inmune. Activa los linfocitos T cuando se necesitan ante una infección, pero sin permitirles reaccionar en exceso. También regula la producción de las citoquinas.
Algunas fuentes de vitamina D para nuestro sistema inmunológico: aceites de pescado y huevos.
Zinc
Cuando estamos faltos de zinc lo primero que detecta esa carencia es el sistema inmune, elevándose el riesgo de estrés oxidativo e infamación.
El zinc es un suplemento importante para el sistema inmunológico, previene las infecciones, pues ayuda al funcionamiento correcto de la glándula timo, donde se producen los linfocitos T.
Buenas fuentes de Zinc: El marisco y las alubias.
2 SUPLEMENTOS PARA AYUDAR AL SISTEMA INMUNE
Moringa
¿Sabías que la moringa ya ha demostrado su efectividad en epidemias tan graves como la Influenza por su capacidad antiviral? En un estudio de hace menos de tres años (Ashraf 2017) se pudo demostrar las propiedades de las hojas de moringa para combatir la influencia gracias a la cantidad de compuestos fitoquímicos que posee. Estudios posteriores han demostrado también la actividad antiviral de la moringa frente a diferentes virus como el VIH y la hepatitis (Akram 2018).
Como es bien sabido, el potencial de la moringa como una de las plantas más importantes del planeta, es aún poco conocido en Colombia pero ampliamente extendido en países orientales y africanos donde su consumo es habitual en la dieta diaria. En África por ejemplo, no sólo se consume, sino que se utiliza en la depuración de las aguas, ya que las hace completamente potables y libres de bacterias, microorganismos y microalgas.
Echinacea
Los numerosos componentes de la raíz de la Equinácea actúan en sinergia para darte todas sus propiedades. La raíz contiene polisacáridos, alcamidas y otros componentes que aumentan la resistencia del cuerpo a los ataques externos y refuerzan la inmunidad. La equinácea es un excelente estimulante de las defensas naturales, que ayuda al sistema inmunológico a funcionar correctamente para hacer frente a las agresiones externas.
La equinácea es una planta eficaz para las vías respiratorias, a las que suaviza y alivia, especialmente en la garganta, la faringe y las cuerdas vocales.